VINCI III
El factor clave que explica el alto rendimiento de VINCI III es un amplio conjunto de cabezales cuidadosamente seleccionados. Así, la profesional puede elegir entre:
Todos los cabezales reemplazables terminan en una placa de micro-electrodos que permite trabajar en las capas más profundas de la piel. La penetración de onda dependerá del tamaño del electrodo elegido.
Este proceso estimula la circulación sanguínea, acelerando así el metabolismo celular para conseguir una mejor oxigenación y nutrición de las células y los tejidos.
Finalmente, el efecto sinérgico del vacío y los rodillos de masaje junto con la vibración, se encarga de drenar los tejidos, desechando las toxinas de los ganglios linfáticos, suavizando la piel y eliminando la celulitis.
El equipo cuenta además con cuatro cabezales de distintos tamaños para poder trabajar con precisión todas las partes del cuerpo y el rostro.